La Asociación Creando Puentes celebra el día de la discapacidad y su 3er. aniversario

La Asociación Creando Puentes cumplió tres años entre los pineros en un acto celebrado este miércoles en el Teatro Martín Recuerda, que presentó un buen aspecto de público.

[Redacción-Pinos Puente] | Fotos: Molina
La Asociación Creando Puentes ha celebrado este miércoles el Día de la Discapacidad, en la que todos sus asociados, familiares y ciudadanos de Pinos Puente se han dado cita en el Teatro Martín Recuerda para conmemorar, también, el tercer aniversario de esta organización no gubernamental pinera.
Su presidenta, Fátima Ruiz, fue la encargada de conducir el acto en el que hubo varias actuaciones.
La primera de ellas llegó de la mano de la compañía de Marionetas La Luna, que con títeres interpretó el cuento del toro que se sentía mariposa.
A continuación correspondió el turno de intervención a la edil de Bienestar Social, Francisca Toribio, quien apuntó que "debemos tener una relación normal con este tipo de personas, que muchas veces están en desventaja, y para ello las instituciones debemos luchar a diario por eliminar las barreras urbanisticas con las que se encuentran".
Formados por el método psico ballet, la asociación granadina de las artes escénicas SUPERART y nueve de sus alumnos realizaron una de sus actuaciones que cautivaron al pública.
A posteriori llegó uno de los turnos más esperados, con la actuación de los componentes de la Asociación Creando Puentes de Pinos Puente, que interpretó un baile de funki creado por la Directora de la Escuela de Danza, Virginia Díaz, quien reconoció que "es un encanto poder trabajar con ellos".
La directora de CEAPS Granada, Leonor Enríquez, leyó el manifiesto reivindicativo para los discapacitados, en los que recordó que "están dotados de plenitud de derechos", y pidió los apoyos precisos "a todos los poderes públicos".
El juglar Javier Tárrega también interpretó un cuento para los asistentes, al que le prosiguió Rubén Millán, un joven de 19 años con discapacidad que dejó patente su afición por la guitarra con varias piezas.
Las madres también tuvieron su hueco en esta gala al ser homenajeadas por sus hijos, que entregaron un ramo de flores a cada una. Fue la antesala de los encargados de cerrar el acto, el Coro Rociero de Pinos Puente, que volvió a deleitar a los asistentes con unas sevillanas, una rumba y una bulería.
La tradicionales velas y el cumpleaños feliz pusieron el colofón final a una tarde para recordar, repleta de emociones y reivindicaciones para que un día, ojalá no muy lejano, su discapacidad no les suponga ninguna barrera ante los demás.
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